19 de diciembre de 2009

Los déjà vu's no existen

Siempre el mismo sueño melódico, la noche sin pausa, el ronquido intermitente y la luz de la primera hora que se cuela por las celosías de mi cuarto.

Ya no llueve, en la eternidad paquidérmica de una tormenta tropical, en el calor de una selva casi tropical, el olor se pinta difuso y transparente pero inconfundible en el rastro incierto de la ropa sucia amontonada en el fondo.

Es martes. Intento dormir un poco mas, apenas ha salido el sol y el calor comienza a reventar en la cama. Me levanto en medio de la somnolencia que me caracteriza. En el pasillo un sonido familiar sabe a extraño, las campanas de la iglesia truenan en mi cabeza, es martes, apenas ha amanecido, no es normal que haya misa hoy. Debe haber muerto alguien.

Mi madre sale de su habitación y me pregunta ¿quién habrá muerto?.

En medio de todo esto, simplemente recuerdo cuantas veces ya he vivido esto. Sin embargo en mi cabeza se repite una y otra vez lo mismo: los déjà vu's no existen.

Pero aun así, no me salen de la cabeza las mismas historias, la misma soledad abigarrada, la sonrisa incierta, la razón propia y diez días de lluvia que despiertan con un habitante menos.

Yo se el final de estos pequeños relatos costeños después de una tormenta tropical estacionaria pero algo en mi cabeza me dice que no es verdad, porque no se puede vivir rebobinando la cinta.

Intento descubrir el acto final de esta historia ella (la que ha dicho que si) apunta el arma y le dispara a el (ese que tiene sed de poder) porque detrás de los hechos aparente se esconden rencores heredados y esa es otra historia.

Al final de cuentas ahora es que todo me queda claro: los déjà vu's no existen. Y solo estoy divagando en un martes donde las campanas de la iglesia no terminan de quebrar el silencio.

Siempre es el mismo sueño melódico, intermitente, profundo, en medio de la noche sin pausa, donde la realidad desaparece y vuelve aparecer mas tarde pero en otro tiempo, donde parece que ya lo he vivido antes... o después.

17 de diciembre de 2009

Respírame

Rompe
disco humeante
respírame
en el párpado
sin tiempo
ciego
cada paso
se rompe
el eco, la voz
respírame
azul
sin tiempo.

La sed de poder

Había hecho el plan, ahora debía esperar. La lluvia era el escenario perfecto, pero había dejado de llover hace un rato, pero nada detendría ya el curso del río que lo habría de llenar de poder.

Salió al jardín húmedo aun, el lodo putrefacto de la fosa séptica comenzaba a oler, en el cielo unos discos anaranjados flotaban inmunes a los habitantes de un pueblo costeño después diez días de lluvia de una tormenta tropical estacionaria. Recordó como convenció a quien le quitaría de encima al ultimo de los ejidatarios que se negaban a su propuesta, sabía que esta noche o mañana temprano habría velorio, tenia que haberlo, de otro modo no podría lograr sus propósitos.

Subió a la camioneta del año que tenía, no podía quedarse en casa, debía tener una coartada, así que fue a la casa del comisario municipal para invitar a su hija para salir a dar una vuelta. Aunque en realidad ella no le importaba, no tenia otra opción que seguir el juego de macho, el cual a veces le costaba trabajo creerse, pero tenia la suerte de no amar a nadie mas que a si mismo, así que esa falta de hombría no significaba un problema para saciar su sed de poder.

La gente caminaba por las calles, después de tantos días encerrados, por lo que tuvo que disminuir la velocidad, entonces recordó a su hermana, que de seguro estaría en la ventana, esperando a que el mar le devuelva el amor. Y por dentro se sintió tan miserable como ella, por no poder amar a la hija del comisario, pero el no estaba loco como su hermana. Al menos no por ahora pensó el y comenzó a reírse a carcajadas.

Pasa el tiempo

Se derrama
despacito, como la leche
en medio de los ojos
explotan las cosas que no se dicen.

Se agrieta
sin dejar rastro, como el sereno
mientras en el silencio
estallan las cosas que no se hacen.

Y en el eco de la voz ciega
todo se vuelve infinito.
Sobre el cielo y la tierra
en medio del universo
pasa el tiempo, despacito
haciendo grietas
comiéndose en silencio
las cosas no dichas
las cosas no hechas.

13 de diciembre de 2009

Los últimos tonos hepáticos del sol hacían ver la silueta del arma

La furia del océano no amainaba del todo.

Otro silencio que mas da. Se trago de golpe todas las cosas no dichas, no hechas.

Había parado la lluvia y el sol deslumbrante alejaba de su mente las sombras. Su afán por alejar el pasado de su cabeza había cesado, ahora todo es nada cuando te encuentras frente a un monstruo de agua que te grita, que te amenaza, donde sabes que facilmente puedes morir. Y a el le grito todo aquello que costaba tanto trabajo decirle al mundo, tantas cosas que su pasividad y ese miedo a todo la habían recluido en una soledad cubierta de indignación y rabia. Pero le había dicho que si y trataría de un modo u otro de ser feliz.

Comenzó la tarde a caer, tendría pronto que regresar al pueblo, pero la paz que habría encontrado la hacia permanecer acurrucada junto a las rocas, abrazada a sus piernas, mientras observaba como el bravo mar intentaba alcanzarla.

El ruido de una camioneta ingresando en el muelle interrumpió su soledad, un hombre camino a toda prisa hasta el borde, lo reconoció enseguida, sabia quien era, no necesitaba saber mas, sabia lo que había sucedido, mientras los últimos tonos hepáticos del sol hacían ver la silueta del arma hundirse en el océano.

La noche se cubrió de estrellas mientras ella caminaba regreso al pueblo, donde sabia que habría un muerto mas pero esta vez encontraría el modo de explicar la verdad. Una sonrisa turbia se poso en su cara mientras con paso seguro atravesaba las huertas de cocos donde esperaría que las cosas cayeran en su respectivo lugar, pero esta vez ella, decidiría todo.

Si la puta valiera un carajo

Si la puta valiera un carajo
tal vez entendería porque tanto escándalo.
En medio de las noches
sobre el rancio recuerdo de una cama muerta sin tiempo
todo es absolutamente una cosa: olvido
........................(o tal vez recuerdo).

Pero es en todo caso inútil
........................ incoherente
.............................absurdo
pensar en el caos como la solución al puto mundo
pero a veces las cosas simples no tienen sustancia
................................................son vanas
................................................superfluas
y sin embargo nada basta al silencio.

Si la puta valiera un carajo
tal vez entendería las cosas que no hacen falta
tal vez podría entender que no se necesita nada
.............................................................................simplemente comenzar.

El ayer encendido

Tendida en medio de la soledad estaba la mesa vacía, iluminada por una vela eterna a los muertos de siempre. La casa que un tiempo estuvo llena de voces, de gritos, de peleas, de risas ahora es un cementerio de recuerdos, donde las cosas se agrían y se cuajan de nuevo en una especie de soledad tan vieja y salada como el agua del mar.

Había llovido tantos días que este lunes no era mas que otro día mas. Pero por fin lo había decidido, habría de quemar todo aquello que al fin y al cabo no eran mas nada... nada. Dudo un momento en lanzar al lodo todo aquello que fue una vez y creer que esperar un día mas tal vez le daría la alegría de la esperanza eterna que siempre a fuerza del amor hace mas fáciles los días.

Cuando escampo supo que no valía la pena. Al fondo del enorme patio cubierto de todo tipo de plantas, al final de esa selva personal, estaba el olvidado horno de tierra. Camino segura con la bolsa negra llena de pasado combustible, los metió todos al fondo del horno, acomodo los cocos secos en lugares específicos y lleno de nuevo la bolsa con aquellos que no habrían de servir en la incineración del ayer.

Pero deshacerse de los recuerdos no es cosa sencilla. Le tembló la mano al momento de querer encender el bonote del coco seco que habría de iniciar su purificación. Se dirigió a la casa nuevamente y sin pensarlo comenzó a hacer la masa para el pan. Habría de ocupar el ayer en algo productivo y hacer que finalmente el olvido se digiera hasta terminar en la fosa séptica de donde jamas habría de volver.

Del cigarro que fumaba, encendió el coco seco y un poco de madera de bocote, poco a poco comenzaron arder, empujo con la pala metálica del pan hasta el fondo el fuego primigenio, el cual rápidamente fue cubriendo el ayer con sus brazos incandescentes. Enseguida metió al horno las placas metálicas embadurnadas con manteca de puerco, sobre la cual descansaban las trenzas de sal y las dulces, las conchas con azúcar encima y los bollos para muertos.

El olor a pan recién horneado comenzó a inundar los alrededores. Al fin se había quitado de encima, para siempre, tantas cosas que le habían cauterizado el alma. Y una ligera mueca muy parecida a una sonrisa salió de sus labios mientras regresaba a través de la selva personal a casa, donde esperaría a que estuviera listo el pan cocinado con el ayer.

6 de diciembre de 2009

Si no es

Si no es el sol
tampoco
habrá noches
ni universos
ni cielos sin estrellas
ni relámpago
ni tampoco electricidad.

Porque sin no es el sol
será el silencio
la oscuridad
arena sin mar ni desierto
vacío sin soledad
el no tiempo.

Si ni es el sol
entonces no habrá noches
ni universos
ni estrellas en el cielo
ni tormentas eléctricas
ni arcoiris
todo será un silencio muerto
será un grano arena sin mar, sin desierto
un eterno vacío sin soledad
será como un reloj inútil que no lleva la cuenta del tiempo

2 de diciembre de 2009

Destino Fijo: El Mar

Despierta finalmente. Abre los ojos, siente frío y se cubre con la sabana. Se coloca en posición fetal, mirando hacia la luz que se cuela en las ventanas, son las cuatro de la tarde. Es lunes y por fin ha dejado de llover.

Sabe también que es su cumpleaños. Por eso ha decidido dormir hasta el hartazgo, pero ya tiene hambre, pero siente una necesidad irresistible de sentir el mar. Se sienta en la cama, enciende su teléfono que hasta el momento tiene 7 mensajes de texto sin leer y 5 llamadas perdidas. Lo apaga de nuevo. En la soledad de la habitación, simplemente piensa lo increíble que es aun seguir con vida, después de tanto miedo, después de tanta culpa, pero hoy todo eso es tan lejano que parecen ser recuerdos de otra vida.

Abre las cortinas de la ventana, la luz entra a raudales y llena la habitación de esa luz limpia y clara que la lluvia suele dejar en las tardes de verano. Sonríe para si, mientras ve la calle llena de charcos y lodo, ve como el movimiento comienza a surgir en ella, se deja envolver en el paisaje de la calle que no se da cuenta de los discos anaranjado que cruzan el cielo, sin que esto revele un presagio, mucho menos una señal.

Enciende en su alma todas las cosas que ya no sirven, quema finalmente todos los residuos de cosas imposibles y mira al cielo descubierto de nubes de brillante azul que comienza a pintarse de atardecer. Necesita sentir el mar, así que viste su piel de tantos años y baja las escaleras, en la cocina bebe agua y come un par de frutas, suspira pensando en todo lo que puede ocurrir sin siquiera pensarlo y sonríe, al fin de cuentas es su cumpleaños.

Sale a la calle con destino fijo: El mar.

Y después... sabe que todo el mundo le pertenece aun sin siquiera pedirlo y sonríe para si.

29 de noviembre de 2009

La bala

Conforme caía la noche, la bala atravesó el aire, no hubo un sonido, ni siquiera un grito, todo fue inesperado, justo en el blanco, no era necesario desperdiciar mas pólvora.

Le cerro los ojos, se hinco, se persigno y pidió perdón al cielo, miro de pronto la habitación, tenia que salir de ahí sin que nadie lo viera. La oscuridad cayó de pronto, aun el olor a humedad y lodo cubría la atmósfera. Había llovido durante dos semanas.

Camino lentamente hasta la esquina donde lo esperaba un cómplice. Se subió a la camioneta, sabia que debía tirar el arma en el mar.

Tantas cosas pasaron por su mente, excepto la razón por la cual volvía a matar. Pero esta sera la penúltima, se prometió a si mismo. Llegaron al muelle, camino a grandes zancadas en el oscuro muelle de concreto vacío, le hubiera gustado que siguiera lloviendo, porque tal vez así podría lavarse la sangre que cubría sus manos, pero había dejado de llover a media tarde.

Lanzo el arma lo mas lejos que puedo. No se dio cuenta de la chica que se encontraba sentada a unos metros de el, mirándolo extrañada, el no se dio cuenta de que lo reconoció enseguida. Suspiro pensando en lo extraño de las cosas y regresó lo andado.

Entro a la camioneta, y se perdieron rápidamente de vista. Ella presentía lo que estaba pasando, pero intento no dejar correr sus deducciones. Dejo pasar el tiempo para poder regresar a casa y esperar que las cosas cayeran por su propio peso. Había comenzado de nuevo pero ¿por cuánto tiempo?

El Tiempo

Se desliza
como viento a media noche
debajo de los párpados
en medio de los sueños

Se desplaza
en la humedad de los ojos
sobre el respiro quieto
dentro del dolor incierto

Se deshace
como aire en los pulmones
a través del universo
en el silencio imperfecto.

Y desaparece.

27 de noviembre de 2009

Siempre será martes

El sol comienza a filtrarse por la ventana.

Sabe que la espera es inevitable. Es lunes, pero siempre parece ser el mismo día, siempre la tarde, parece ser la misma tarde.

Ha cantado despacito para no espantar a las gotas de lluvia que se adhieren al cristal de la ventana, por el cual rayos dorados de sol iluminan los recuerdos tantas veces olvidados.

Se esconde de esa claridad mental donde todo es absurdo, donde nada tiene sentido y rie bajito sacudiendo el salitre que mancha sus manos.

Tanto mar de por medio, tantas olas desiertas, tanta espera en silencio, tanto amor incompleto. Toma con los dedos un rayo de sol que le hace recordar el calor de los días del verano, aun cuando recién comenzó el otoño. Su cabello blanco refleja el tono hepático del atardecer, mientras se da cuenta de que la espera es inevitable.

Es lunes otra vez, pero para ella, siempre será el martes en el que su prometido le juro que habría de volver.

El mareo

Gira despacio
todo
lúgubre vértigo
luz sin sentido
suelo vertical donde se mece la aurora.

Pasan todos los recuerdos
todas las noches
como siempre
un poco mas de lo mismo
pero con mas nostalgia quizá.

Nausea absurda
violento silencio
en medio de una calma
que no tiene final.

Giran las cosas
sobrepuestas
eternas
evanescentes
en medio de la mirada confusa
en medio de la mirada perdida
todo se cambia de lugar.
Es el mareo
que revienta en un cielo vertical.

19 de noviembre de 2009

A sal el viento

El viento sabe a sal.

Aun en medio de la tarde que se desprende luminosa, cada rayo de luz simboliza un tiempo que esta por venir.

Ha dejado de llover hace un par de horas, de pronto las calles crujen al sol, desde la Sierra Madre el viento frío comienza a llegar en intervalos. Es como un recordatorio de que el clima así como la vida es un constante subir y bajar de grados centígrados.

Los mosquitos aun no aparecen, por lo que abre las ventanas para que dejar salir el humor de tantos días de tormenta, un olor familiar inundó la habitación, a unas casas un horno de leña se encontraba preparando empanadas de coco y camote, trenzas con azúcar y bollos de funeral. El olor era tan parecido al recuerdo de siempre, pero con un sabor diferente, con un tono más brillante y hermoso.

Sin darse cuenta comenzó a oscurecer, luciérnagas azules iluminaron el jardín, así lo había decidido después de veinte años rodeado de cosas que no existen, sentado en la incertidumbre de la espera eterna de la confirmación o el rechazo mas nunca sonó el teléfono ahí. Lo había decidido.

Cerro las ventanas con cuidado de no espantar a las luciérnagas, desconecto el teléfono y lo colocó en el cesto, se miro al espejo y se sonrió. Finalmente podría dormir en paz, se dirigió a la puerta, la cerro con llave, camino entre el camino de piedras aun húmedas, salió a la calle con la guía del olor a pan recién hecho.

Miro a cielo, recordó cuanto tardaban en llegar la luz de las estrellas a sus ojos y quiso llorar, tal vez había llegado demasiado tarde, pero una cosa era cierta, ahora ya nada era imposible. Y sonrió para si, saboreando en ello el sabor a sal que traía el viento.

5 de noviembre de 2009

Lunes de sexo oral y recuerdos en plexiglás

Húmedo camino
boca versus piel
día, tarde, noche
cualquier momento es de placer
mientras la semana se comienza a desgranar
en nuestros cuerpos los horarios no existen
el sexo es una necesidad
mientras el amor es un lujo en el que facil te puedes romper...

Cigarro, cafeína, goma de mascar
tu rostro se escapa, se empieza a difuminar,
trafico, ruido, smog
todo el recuerdo lo he empaquetado en laminas de plexiglás
es solo tiempo sin tiempo en particular
la saliva hace resbalar el ayer
besos que me hacen olvidar todo lo que fue.

La voz siempre es diferente también la calle, la hora y el lugar
a través de la sinfonía de una ciudad intermitente
temblores personales acompañan sonidos guturales
mientras intento plastificar aquello que pudo ser
en medio de la petit mort extiendo al recuerdo en plexiglás
no debo olvidar...

ahora no...

no quiero...

no te puedo olvidar.

1 de noviembre de 2009

Y sonríe

Aun huele a recuerdo.

Pero ha dicho que si... y sonríe.

Ha dejado de llover, el sol se cuela entre los árboles y el mar a lo lejos suspira despacito. Ha escuchado al silencio dormido en los caparazones de los tamarindos, ha podido ver los ojos dulces de las rosas en un amanecer lluvioso.

El sol comienza a evaporar la lluvia de tantos días, la humedad se abarrota de olvido y se quiebra en los labios. A lo lejos los insectos vuelan entre los lagartos para escurrir el agua que moja sus cuerpos. Los niños abren las ventanas, miran el suelo lleno de lodo, sienten el calor en sus caras, se frotan los ojos y sonríen.

En medio de todo el desparpajo de los últimos días todo parece amanecer con la cara recién lavada, con un aire que de se llena con el olor a nuevo. Las plantas se mecen lentas en el viento que se lleva al silencio, las calles relucientes comienzan habitarse, los niños ríen en la puerta de la casa, el perro ladra a las aves que extienden sus alas en el jardín .

El recuerdo comienza a diluirse.

El presente se vuelve tangible mientras el tiempo se llena de vida y el sol ilumina las risas sobre las calles que parecen recién descubiertas.

Y recuerda que le ha dicho que si... y sonríe.Justificar a ambos lados

27 de septiembre de 2009

Duvet ^ ^

El humo se había despejado del castillo, restos de exoesqueletos de lo que alguna vez fue el transporte de los no terrestres se encontraban carbonizadas, ennegrecidas a pesar de la lluvia que cayo horas mas tarde del ataque de los hackers.

Ese 23 de septiembre había amanecido con un cielo cubierto de nubes de tormenta, después de varios días sin que las fabricas de la ciudad emitieran contaminantes, el aire se notaba un poco mas puro, un poco mas libre, un poco mas aire.

En cuanto el sol iluminara el extremo este del valle comenzaría el ataque, lo decidieron porque sabían que muchos soldados del gobierno apoyaban a los no terrestres, no querían lastimar a humanos, querían liberar a su ciudad de los no terrestres. El valle con dos volcanes inactivos esperaba el momento en el que el primer signo de claridad irrumpiera en la calma de la noche. Días previos habían ya lanzado ataques señuelos para tener al enemigo con incertidumbre acerca de si finalmente darían el golpe final, de esta manera evitaron que los no terrestres despegaran sus naves y permanecieran recluidos en el castillo.

Kyel desde el extremo norte de la ciudad se dirigía con el equipo de “Fuego en movimiento” los cuales tenían en su poder tanques de gas butano de todos los tamaños que al ser lanzados al aire por una fuerza telequinética los hacían estallar a su antojo, en dado caso de que uno de estos no estallara, alguien se encargaría de generar fuego en el tanque a fin de que este terminara explotando.

Alek desde el extremo oriente iba con el grupo de “Protección” los cuales estaban encargados de proteger a los humanos conforme estos fueran cayendo, mientras desde el lado sur Jessica con el grupo de “Fuerza de empuje” iban decididos a romper la entrada principal del castillo, con ella se encontraban todos aquellos que podían controlar su energía de tal manera que eran capaces de lanzar fuego, agua, objetos o lo que fuera necesario para atacar al enemigo pero que al mismo tiempo eran capaces de crearse un campo de protección que impidiera resultaran lastimados. Del lado poniente se encontraba “La fuerza de resistencia”aquellos que a pesar de no contar con ningún poder se habían unido en la guerra contra los no terrestres, ellos contaban con todo tipo de armas para realizar el ataque.

En cuanto la claridad se asomó desde el lado sur comenzó la batalla, como esperaban, humanos eran los que defendían el castillo, por lo que fue necesario utilizar gases aturdidores, en cuanto entraron al recinto, los no terrestres optaron por salir en sus naves, sin embargo ya los esperaba Kyel con unas pequeñas explosiones que las hicieron caer en el aire y mientras otras no pudieron ni despegar, comenzaron a salir por el extremo poniente donde ya los esperaba la “Fuerza de resistencia” miembros del gobierno se encontraban entres estos que como ratas ansiaban salir del castillo. Alek en cuanto se entero de que habían entrado al castillo entraron en movimiento para ir rescatando a todos los heridos.

Durante siete horas las explosiones no dejaron de escucharse en los alrededores del castillo, los no terrestres salieron a defenderse y al tener poderes telequineticos más fuertes que los humanos podían fácilmente deshacer la resistencia que estos ofrecían. Salieron todo por un pasadizo que daba al lago del castillo en donde se encontraba Alek con todos los heridos, el grupo de 17 no terrestres que habían logrado salir del castillo s encontraron de frente con cientos de heridos, los pocos que aun tenia fuerzas opusieron resistencia, sin embargo los no terrestres los lanzaban por los aires como si se tratara de hojas de papel. Al ver Alek que iban a escapar se concentro de tal manera que pudiera su poder extenderse sobre los enemigos, cuando se sintió seguro corrió tras ellos protegiéndose de sus ataques, finalmente encontró la oportunidad, un rayo de luz blanca salió de su cuerpo e inmediatamente se convierto en una luz cegadora que se extendió a varios kilómetros de el. El tiempo se detuvo, Alek ya no podía hacer mas nada simplemente esperar a que aquellos que no fueran alcanzados por su poder pudieran atacar a los no terrestres, pero esto tomo por sorpresa a todos, nadie entendía que había sucedido. Jessica que se encontraba en una de las torres del castillo vio el resplandor, supo que Alek había utilizado su poder y debería de ser por una buena razón, salto de la torres para ir ayudarlo, pero sabia que el no podría mantener el tiempo detenido por mucho tiempo y en cuanto fuera en retroceso solo tenía segundos para escapar. Mientras tanto “Fuerza de resistencia” se dirigía al lago para ayudar a trasladar a los heridos a un lugar seguro cuando el halo de luz los cegó, esperaban una gran explosión que no sucedió obviamente.

Alek no pudo sostener mas y comenzó a retroceder el tiempo, unos segundos mas tarde cayo sobre el suelo, había utilizado toda la energía que tenía, los no terrestres en cuanto se liberaron de su prisión invisible, sabían que la razón por la cual habían tomado la ciudad se encontraba a su alcance, uno de ellos los señalo en punto desde donde había visto a alguien dirigir un rayo luminoso, crearon un campo que los protegiera y se dirigieron hacia el, en cuanto vieron su rostro se dieron cuenta de que su misión no había fracasado, tenían a sus pies, al humano con el don mas poderoso.

Lo levantaron con un movimiento mental y se dirigieron de regreso hacia el castillo pero antes hicieron que el aire se incendiara en un radio de unos cinco metros alrededor de ellos, una vez dentro del pasadizo cerraron la entrada y se dirigieron a toda prisa en el castillo donde sabían que estaría mas despejado porque nadie ofrecía ya resistencia.

Jessica alcanzo a ver como un circulo de fuego rodeaba a los no terrestres, cuando este se detuvo, vio que habían entrado por una entrada en la tierra que ahora se encontraba cubierta de rocas, intento con sus poderes quitar los obstáculos, pero no podía, sabía que habían colocado una protección invisible.

Mientras tanto Alek se encontraba muy débil, flotaba en el aire como un títere, veía como los no terrestres despejaban todo cuanto encontraban frente a ellos, llegaron a un claro del castillo donde se podía observar el cielo cubierto de nubes de tormenta, entonces una explosión en el cielo hizo desparecer las nubes y una enorme nave dirigió un rayo de luz hacia donde se encontraban los no terrestres, desde todos los alrededores vieron lo que sucedía, y esperaban que una enorme explosión hiciera estallar el castillo, pero no paso así.

Alek por alguna extraña razón sabía que no debería ir con ellos, tenía que encontrar el modo de escapar de ellos, se concentro nuevamente, expulso toda la fuerza interior que poseía para evitar ser retenido por los no terrestres. La luz blanca que surgió de el, se confundió con el haz luminoso que descendía hacia ellos, el tiempo se detuvo nuevamente, alrededor de el, solo tenia una oportunidad, entonces lo que paso a continuación ni Alek lo esperaba, el tiempo comenzó a ir en slow motion, no había logrado detenerlo, simplemente este transcurría lentamente, entonces alcanzo a tomar la ultima columna de piedra que estaba en el umbral de ese jardín interior, los no terrestres se acomodaban en el centro, alcanzo a ver como la luz se acercaba a ellos, entonces libero al tiempo, se sujeto de la columna lo mas fuerte que pudo, todo se iluminó de pronto, cayo al suelo, miro hacia el jardín, los no terrestres ya no estaban y el aun seguía en el castillo.




Fin

de

Duvet 1a parte

20 de septiembre de 2009

Duvet ^

Después de haber destruido el sistema de control del gobierno. Los hackers lograron ganar el tiempo suficiente para salir de la ciudad. Mientras tanto los no terrestres habían instalado su cuartel general en lo que quedaba del castillo.

La población fue evacuada en su mayoría eventualmente, si bien únicamente los ataques se produjeron al inicio, ahora en todo reinaba una paz que se rodeaba de incredulidad e incertidumbre. El ataque de los no terrestres fue planificado, ellos sabían que la mayoría de las personas que deseaban secuestrar se encontraban en las zonas aledañas al castillo, pero no contaban con que alguien se había enterado del plan y se les había adelantado evitando así que se cumpliera su objetivo.

Los hackers a través de enlaces subterráneos lograron sacar a las personas que se encontraban en la lista que robaron del gobierno. Descubrieron que todos tenían un don, pero no solo eso, muchos de ellos tenían alguna relación con los experimentos de clonación del gobierno de hacía veinte años. Ninguno de ellos era un clon, por lo que la sospecha de experimentos genéticos que permitieran crear humanos con dones y poderes especiales era la única respuesta.

Kyel como líder de los hackers, emprendió una lucha contra los sistemas de seguridad del gobierno, lograron destruir el sistema de abastecimiento de electricidad y agua potable. Sabían que era cuestión de tiempo para que el enemigo humano perdiera el control de la situación.

Sin embargo los no terrestres aun representaban un peligro inminente para los hackers, en realidad eran su enemigo natural en toda esta situación. ¿Por qué? Simplemente porque todos los hackers tenían dones y todos ellos provenían del mismo proyecto de manipulación genético. Además muchos de ellos había sido adoptados por Yamagata Corp. donde habían creado un instituto para que aprendieran a utilizar sus poderes, aunque en realidad aun seguían realizando investigaciones con ellos.

Cuando en un ataque por parte de un grupo desconocido, asesinaron al líder de la corporación el Dr. Daniel Yamagata, los chicos que habían pertenecido a la institución que el dirigía, se unieron creando un grupo de rebeldes que se protegerían los unos a los otros, pero que sobre todo velaban porque la ciudad conociera la verdad que el gobierno intentaba ocultarles, abogaban por los derechos de los clones, peleaban por la igualdad entre todos los seres humanos.

Crearon su refugio en las entrañas de la tierra, donde antiguamente fue un templo místico, ahora ellos se cobijaban en Duvet y con sus dones lograban poner en jaque al gobierno de la ciudad, pero ahora se encontraban frente a un enemigo diferente, un enemigo al que desconocían.

Habían decidido realizar el ataque directo el 23 de septiembre justo cuando la luz del sol se asomara por las montañas, muchos de ellos sabían que esta lucha directa contra los no terrestres podría significar su muerte, pero tenían que expulsarlos de su tierra, porque a pesar de todo, ese valle era todo lo que tenían, ese lugar al fin de cuentas era su nación.

16 de septiembre de 2009

Duvet + +

Jessica no dejaba de pensar en el futuro. Desconocía que debería de hacer ahora. Camina con el hijo de su tutor a lado, se encontraban un par de cuadras del laberinto, la multitud se encontraba reunida ya desde ahí, todo el mundo hablaba de lo ocurrido con la destrucción del castillo por parte de los no terrestres, los cuales aun no se habían identificado, pero se sospechaba que eran el grupo Delta G, un grupo de rebeldes que habían logrado sobrevivir a costa del trafico de tecnología e información.

Jessica perdió de vista a Alek, entonces sintió un miedo terrible, buscó alrededor pero no estaba el ya ahí. Entonces la voz de Alek la llama desde la esquina del laberinto, se dirige hacia el a toda prisa, sonríe en cuanto lo observa, pero el no se da cuenta, se dirigen hacia la parte trasera del templo religioso de 500 años.

No deberíamos estar aquí Alek. Vamos, no podemos tardar mucho, detrás de este cuarto hay una pared falsa. ¿a dónde vamos?. Tranquila es el refugio. ¿Refugio?. Sí, tranquila, vamos, con cuidado con los escalones, en unos momentos llegaremos.

Jessica seguía con aprehensión a Alek, su claustrofobia era impredecible, sujeto la mano de Alek, hasta que llegaron a una espacio abierto. Un domo metálico estaba sobre ellos, había una edificación en ruinas, alrededor de una pequeña fogata un grupo de personas se encontraban conversando.

Venga Alek, pero ¿quién es ella?. Es Jessica, de no ser por ella, no hubiera podido llegar aquí. Pero... eres un clon. Vamos no seas grosero que ya olvidaste lo que te conté por teléfono. Eh, si claro, bueno Alek, ven ya estamos todos juntos y sospecho que podemos confiar en ella.

Una vez que estaban todos alrededor de la fogata, comenzó a relatarles lo que habían descubierto los hackers, el ataque estaba planeado en unión con el gobierno, los no terrestres venían por ciertas personas, les mostró al lista a los presentes que la fueron pasando una vez que veían su nombre en ella. Están aquí por que hemos logrado descifrar la lista que el gobierno tenia en su poder, ellos dieron la autorización de secuestrarlos, como pueden ver, significa que ellos quieren algo de ustedes que sospechamos tiene que ver con los experimentos genéticos que se realizaron hace 20 años, sospechamos que todos los aquí presentes tenemos algo que a ellos les interesa.

Jessica escucho atenta las palabras, cuando el silencio reinó entre los presentes, pregunto: ¿Quiénes son ustedes? ¿Cómo saben todo esta información?. Desde la cima de las ruinas una chica le respondió: Somos los hackers y sabemos todo esto porque no solo somos expertos en sistemas de comunicación, sino que también tenemos dones que nos facilitan nuestro trabajo.

Alek mudo de la impresión de lo que había escuchado decir a su amigo, ahora se enteraba que quien era su mejor amigo era miembro del grupo de resistencia que luchaba ferozmente contra el gobierno. No podía pensar, todo esto lo tomaba por sorpresa, pero no sabía que estaba haciendo ahí, porque su nombre no se figuraba en la lista, mucho menos el de Jessica.

¿Qué quieren ellos de mi? Pensó para si. Jessica lo miró, lo tomo de la mano y justo cuando pensaba decirle algo, la líder de los hackers hablo de nuevo: Bienvenidos a Duvet, a partir de ahora todos ustedes se encuentran bajo nuestro resguardo, llámenlo secuestro, pero no podrán salir de aquí hasta que sepamos que buscan en ustedes. Vamos hackers es hora de trabajar.

La mitad de los que se encontraban con Alek incluido su mejor amigo subieron los escalones hasta donde se encontraba la líder, miro a quienes se quedaron junto a la fogata y les dijo: Como pueden ver ellos son parte de nuestro equipo y se encargaron de traerlos con bien hasta nuestro hogar, vengan, que es hora de comenzar la guerra.

11 de septiembre de 2009

Duvet - -

20 años atrás



El Dr. Goldman se encontraba analizando los resultados de las pruebas, habían pasado las 36 horas necesarias. No había señales que indicaran un resultado positivo, esto lo lleno de alegría, su hijo Alek podía llevar una vida normal.

Entro al laboratorio el Dr. Yamagata, e hizo lo mismo que Goldman.

- Bueno, parece que no tendrás problema con que Alek deje de venir al laboratorio.

Un sonrisa se dibujo en su rostro, lo que oscureció el semblante de Yamagata.

- Pero Jessica aun tiene que permanecer aquí, no importa la relación que exista entre ustedes. Ella ha resultado tener un don particular que nos tiene a todos muy entusiasmados. Ella es la muestra de que nuestro trabajo vale la pena.

- No olvides que son tan humanos como nosotros, todos ellos.

- La paternidad te ha ablandado Goldman. Ellos son clones, no son humanos naturales, son humanos creados con un propósito. No deberías de olvidarlo.

- No lo olvido, simplemente que no es lo mismo estudiarlos y analizarlos aquí, que convivir en casa con ellos en tu casa y...

- Tu renuncia ha sido aceptada. Tienes únicamente que firmar el tramite para que Alek salga del programa. Aun cuando estés fuera del proyecto, no debes nunca divulgar nuestro trabajo, nuestros aliados se mostraron reacios a dejarte ir, pero los he convencido.

- Gracias Dan, sin tu ayuda no hubiera podido salir del proyecto.

- Es simplemente una forma de darte de vuelta el trabajo que has realizado con nosotros. En unos minutos entregare los resultados que liberan a Alek.

- Gracias y hasta pronto Dan, sabes que tienes las puertas de la casa abiertas para ti.

Inclino el tronco y sonrió. Se quedó solo en el laboratorio. Sacó una segunda muestra, los resultados eran los que esperaba, ahora simplemente tenia que mantener la información oculta, porque significaría la muerte del Dr. Goldman y su recién creada familia.

8 de septiembre de 2009

Duvet +

Jessica se encontraba detrás de los no terrestres. Mi don solo permitía a las personas que me observaban ser testigos de que el tiempo se detenía, por lo que Jessica fue testigo de cómo el tiempo comenzó a ir en reversa.

Ella era un clon humano, los códigos de barra que le habían tatuado en su dedo meñique de su mano izquierda y el que se encontraba justo entre los ojos en forma vertical. Si bien al ser un clon solo podía aspirar a formar parte de la servidumbre algunas veces sus dueños les permitian estudiar el sistema básico de educación. Sin embargo a Jessica la habían rescatado de los orfanatos experimentales, con la suerte de tener un tutor, no un dueño, por lo que su vida fue mucho mas sencilla y con mayor libertad que al resto de los clones humanos. Algunos de estos podían sufrir la desgracia de ser simplemente entretenimiento y eran encerrados en los laberintos que tanto estaban de moda, sin embargo movimientos de igualdad humana pronto comenzó a atacar a los burgueses que se atrevían a rebajarlos a la categoría de animales. Si bien existían otro tipo de clones que de humanos tenían muy poco, todos caían en la misma categoría.

La chica cuando vio que un haz de luz salió disparado del arma, concentró su energía, pero no sabia que podía hacer para detenerlos, fue cuando se dio cuenta de que el tiempo iba hacia atrás, entonces se dio cuenta de que tenia que hacer algo para evitar que los no terrestres consiguieran su objetivo. Con solo pensarlo un circulo de fuego rodeo a los no terrestres y el haz de luz blanca que golpeo al chico desapareció haciéndolo caer fuertemente sobre el suelo. Atravesó el circulo de fuego y ayudó al joven a levantarse y corrieron en dirección contraria.

- ¿Te encuentras bien? -
- Sí, creo que sí. – Entonces la miro de frente y se dio cuenta del tatuaje horizontal entre los ojos y se detuvo.
- ¿Qué pasa? -
- Eres... -
- ¿Un clon? -
- Lo siento. – Agacho la cara y volvió a mirarla. – Soy Alek -
- Jessica. Debemos buscar un sitio seguro, los no terrestres han tomado el castillo y al parecer están buscándote, ya me imagino porque, ese don tuyo es muy poderoso. -
- De nada sirve, solo puedo regresar segundos. -
- Seguro es porque no has practicado -
- ¿Practicado? – La miró extrañado.
- No importa eso ahora. Tenemos que ir a un sitio seguro. -
- Vamos al laberinto Toxxo -

Una explosión a unas cuadras de ellos los hizo apresurar el paso, la locura comenzaba a desbordarse, la lluvia ácida comenzó a caer con fuerza, por lo que tuvieron que refugiarse de ella antes de seguir su camino. Sonó el teléfono de Alek, era una llamada, sin pensarlo contesto.

- ¿Bueno? -
- ¿Dónde estas?. El gobierno ha concentrado a las fuerzas en el laberinto Toxxo, los no terrestres se han apoderado de el castillo y ha secuestrado a varios alumnos. ¿Por qué no respondiste mis mensajes? Alek di algo. -
- Trataron de secuestrarme... aun nos falta para llegar al laberinto, la lluvia nos detuvo. -
- ¿Estas bien? -
- Sí, no te preocupes, ya encontrare el modo de llegar. -
- Los hackers se han unido al gobierno para atacar a los no humanos, temo que la señal del teléfono sea pronto eliminada, estoy en el extremo sur, búscame en la entrada del subterráneo, tenemos que llevarte a un lugar seguro. -

Cuando busco a Jessica a su lado no la encontró. Entonces la vio a unos metros delante que iba hacia el con unas bolsas plásticas.

- No podemos perder tiempo, pontela, de algo te protegerá -

Alek se coloco la bolsa encima, ella corrió, la siguió, entonces recordó que cuando era niño, había tenido un sueño muy parecido, entonces pensó que tal vez podía tener el don de ver el futuro, pero antes que todo tenia que llegar al laberinto, ya después pensaría en todo eso. Y ella... ¿qué iba a pasar con ella?

27 de agosto de 2009

Duvet -

15 años antes...



El sonido nocturno despeinaba las hojas del libro que mi madre había dejado sobre la ventana. Los efectos de la glaciación aun no alcanzaban el pueblo, todo era cuestión de tiempo. Las cosas mantenían aun ese halo de normalidad que tenía el planeta al inicio del siglo.

El viento frío entraba de a ratos, aun cuando el verano estaba justo a medias, teníamos que dormir abrigados. Me levante y cerré la ventana. Entonces vi luces en el cielo, que volaban dispersas y se perdían en el fondo del horizonte oceánico.

A mis seis años nada podía sorprenderme ya. Hacia unas semanas que la Confederación Estelar había obligando a los gobiernos del planeta a sacar sus trapos sucios, se encargaron de contarnos la historia real de nuestro planeta. Esa fue la condición que estipularon a fin de poder ayudarnos con tecnología que nos permitiera sobrevivir a la glaciación que se acercaba. Sin embargo la verdad solo trajo problemas a la Confederación Estelar que terminó por fragmentarla finalmente.

Volví a mi cama, mi hermano roncaba, me volví a poner en pie y me acerque a su cama para moverlo hasta que dejara de producir ruido. Eso es lo único claro que recuerdo, después todo es difuso, mi memoria mezcla fragmentos de realidad y de sueños que no me permiten discernir entre aquello que sucedió y lo que no.

Todo lo que recuerdo que una luz azul que ilumino la habitación, entonces los vi por primera vez, en el umbral de la puerta de mi habitación, ellos, los no humanos, los grises, los reptiles mezclados entre humanos. Uno de ellos extendió su mano hacia mi e inmediatamente quede inmóvil, uno de ellos me miro fijamente y un dolor agudo taladró mi cabeza, sus ojos delataban sorpresa, entonces levanto su mano y mi cuerpo comenzó a levitar, estaba inmóvil completamente con la mirada fija en ellos, aun me tenia la sabana sobre mi, la cual al separarme de la cama lentamente cayó al suelo.

Ellos eran enemigos de los miembros de la Confederación Estelar, seres mestizos e impostores que luchaban por su supervivencia a costa de los humanos.

Mi cuerpo se acercaba a ellos, algo en mi luchaba algo me decía que no podía permitir que me secuestraran, con todas mis fuerzas trate de liberarme, uno de ellos se dio cuenta y un haz de luz blanca salió disparado contra mi, entonces el tiempo se detuvo y todo comenzó a ir hacia atrás, me quede helado al darme cuenta como el haz de luz regresaba al artefacto que lo liberó, entonces vi los ojos de quien disparo el arma y perdí la concentración, seguía en el aire todavía y estaban por dispararme en haz de luz blanca, entonces trate de extender mis manos y al hacerlo pude liberarme de la prisión invisible que me retenía, finalmente cai al suelo y cuando pude levantarme me di cuenta de que ya no estaban.

Salí de mi habitación, la puerta que daba al traspatio estaba abierta, de nuevo esa luz azul ilumino la casa, salí al patio y sobre mi se elevaba un pequeño disco luminoso, estuvo quieto unos segundos y enseguida a toda velocidad se elevó hasta desaparecer de mi vista. Me quede quieto, mirando hacia el cielo estrellado, fue cuando por primera vez vi una aurora boreal, pero aun no sé si fue un sueño o fue realidad, pero la recordaría siempre cubriendo el océano.

¿Qué haces ahí? ¿Por que no te acuestas? No me dejas dormir.

Mi hermano me encontró en medio del patio trasero viendo al cielo, me dice que lo mire fijamente, puse mi cabeza de lado, le sonreí, camine hacia la casa, me fui directo a mi cama y me quede dormido.

Todos mis recuerdos de ese momento son difusos. Pero puedo estar seguro que no fue un sueño, ellos venían por mi, pero aun no se porque.

15 de agosto de 2009

Duvet

Sombría era la atmósfera, nubes de polución cubrían el cielo, los parques de la universidad eran de lo mas normal en esta época de inicio de cursos. Recién había terminado el summer break y la legislación de los no humanos tenia a la universidad en constante movimiento.

Camine sobre la plaza principal, desde ahí pude ver que el jardinero levitó un poco para poder podar el árbol, mientras los chicos jugaban tras un balón que constaba de automovimiento, paso de pronto por mi lado e intente detenerlo, pero fue imposible intentar tocarlo.

Me recoste sobre el césped, había a lo lejos rumores de tormentas eléctricas, hacia años que no llovía, pero el agua nunca faltaba aquí. La luz poco a poco comenzó a menguar. Pronto se haría de noche. Debería de apurarme a salir de la universidad, por lo que tome la ruta rumbo al castillo.

Un sms llegó a mi teléfono: "Hay clones en el laberinto Toxxo" inmediatamente localice la dirección electrónica del laberinto para poder ver la noticia en vivo. En efecto había unos clones que lloraban y gimoteaban buscando la salida.

Afuera había manifestantes que apoyaban los derechos humanos de los clones y estaban en contra de que estos fueran utilizaran como seres sin alma y peor aun que fueran protagonistas de eventos para entretener a la muchedumbre.

Los hackers inmediatamente cerraron el streming de la pagina. Sabía que no podía dirigirme al castillo por la ruta del laberinto, debería de ingresar al subterráneo. Justo antes de encontrar una de las plataformas de descenso, una docena de naves flotantes de la seguridad nacional se dirigían rumbo al laberinto. Otro sms llegó a mi teléfono: "Tienes una copia del ensayo del cataclismo en el 2012?" Respondí que lo tenía en mi apartamento, que en cuanto llegara lo enviaría. "Hay reportes de que esta lloviendo en la zona norte, si vas por el subterráneo tal vez puedas quedarte entre islas" Carajos, eso no me lo esperaba, mi teléfono no era de gran ayuda para mantenerme informado de lo que pasaba en la ciudad. Ahora tampoco el subterráneo era un sitio seguro. Decidí tomar la ruta que me dejara mas cerca del castillo, pero que no llegara a los limites de la zona norte.

El viaje fue lento, sofocante, la humedad de la lluvia había ya entrado al sistema subterráneo, comenzaba a evaporarse, tenia que salir de ahí lo mas rápido posible. Del techo del subterráneo salieron las mascarillas con oxigeno, coloque la mía, es la sensación mas incomoda. Un nuevo sms "Debes salir del subterráneo, están cerrando todas las estaciones de la ciudad, no se sabe que esta pasando, dicen que hay un golpe de estado". Se detuvo en la estación siguiente y aun me faltaban dos mas para llegar, entonces se fue la luz, sabía que eso no era buena señal, las puertas aun seguían abiertas por lo que salí a toda prisa al igual que todos los que se encontraban en la estación. Afuera todo estaba en calma, la gente se disperso, así que decidí correr rumbo a casa.

Mantuve el paso seguro evitando las calles cercanas al laberinto. Entonces volvió a sonar el teléfono "Creo que ha llegado el momento, ya están aquí, hay una naves nodriza dispersando la polución sobre el centro de la ciudad. Donde estas?". No podía creerlo, finalmente estaban aquí los no terrestres. Un temblor hizo que me detuviera, durante esos cuarenta segundos un instante me pareció eterno.

Finalmente a lo lejos podía ver el castillo, camine con calma entre las calles de adoquines, un rayo enorme destruyo la torre este del castillo. Me detuve, mande un sms preguntando que estaba pasando, del castillo surgían luces blancas en todas direcciones. No sabía que hacer. Entonces a lo lejos vi un par de no terrestres, me acerque corriendo a ellos, seguro que podrían salvarme, ellos me miraron, no se movieron del lugar, me detuve a unos metros cuando un sms rompió el momento "No te acerques al castillo, los no terrestres vienen por ti, son los enemigos, ve al laberinto, ese es ahora el lugar mas seguro. Allá te veo."

El terror invadió mi cuerpo, sabia que no había modo de evitar este encuentro, por lo que tenia que recurrir a utilizar mi don, un halo blanco envolvió mi cuerpo, ellos sospecharon lo que trataba de hacer, lanzaron sus rayos blancos sobre mi, uno de ellos se dirigía inevitablemente hacia mi, justo fue cuando el tiempo comenzó a regresar, la escena iba en rewind, sin embargo la luz viaja mas rápido que tiempo, no lo pude evitar la luz blanca llenó mis ojos, alcanzó mi cuerpo...

3 de agosto de 2009

1: Uno

Miró el monitor frío. Las imagenes de una ciudad invisible anunciaban un periodo extraño del pensamiento: Déjà Vu. Sabía que no estaba buscando nada y sin embargo había pasado un año.

Ahora, sobre, con, mientras, después... nada. Todo era un sueño, palabras de una visión inteligible.

Recargado en el respaldo el recuerdo, solo atinaba a pensar en lo que podía suceder en un tiempo sin tiempo, sin orden, sin nada.

Diez días en el exilio, cubierto de imagenes y recovecos de silencios absurdos. Imagenes pornográficas y adulterados por efectos sicotropicos llenan los ojos y parece no haber reflejos sobre el cual guarecer a la imaginacion.

No llueve, es verano, la fauna vuela sobre el clima pretérito sobre la sangre futura...

El duelo, las lágrimas, la esperanza, el amor, la espera, el silencio, los giros del tiempo, la tierra, la mañana, la luna, la nube, el grito, el aura, la palabra, el no tiempo.

Vomitaba un poco por los dedos a veces, mientras sobre el teclado el hielo de la ausencia y la esperanza se mezclaban para dejar auroras boreales mientras se tejen palabras en un tiempo sin mañana.

Un ciclo justo hecho a la medida, no tiene sentido perder la cabeza.

Se pueden extrañar tantas cosas, menos el recuerdo.

Y mientras tanto... uno.

31 de julio de 2009

Despierta

El viento de la tormenta ha comenzado a levantar enormes nubes de polvo, el gato se ha acurrucado en mis brazos, los rayos y truenos comienzan a escucharse más cercanos, es imposible poder ver algo.

Sobre mí escucho un sonido parecido a un helicóptero, cuando levanto la mirada, veo tres dirigibles enormes sobre mi, del mas grande algo desciende, una canasta se tiende en el suelo, no tengo opción, tendremos que subir, mientras la canasta sube, la lluvia comienza a caer, los rayos no tardan en aparecer. Estoy cada vez mas alto y más cerca de ingresar dentro de este dirigible, un rayo enorme me ha cegado, el sonido es acompañado después por una explosión, ha alcanzado a un dirigible, la canasta se mueve y pierdo en equilibrio, me abrazo al suelo. Finalmente hemos ingresado, ahora no sé si este o no a salvo.

Estoy frente a una especie de hangar, veo unos pequeños planeadores oscuros a ambos lados, hacia el frente una puerta corrediza como de elevador se abre, no tengo otra opción que ir ahí.

Se ha abierto la puerta, estoy en una sala llena de controles hacia un extremo, mientras hacia el lado contrario hay una especie de sala de estar. Un voz se dirige a mi:

- Bienvenido a bordo-

No logro ver a nadie en la enorme habitación, tal vez el dirigible tenga inteligencia propia y me este hablando. Camino hacia el frente, cuando tras de mi se vuelve a abrir la puerta corrediza.

- Iñaki Rodríguez, espero estés cómodo, lamento no haberte recibido antes, pero tenia que verificar que es lo que habíamos perdido en el otro dirigible, afortunadamente solo era metal y combustible. Por suerte tenemos de sobra para seguir volando en este. -

- ¿Quién es usted?. -

- Ah, es verdad, que descortés soy. Permíteme presentarme. Soy el Dr. Markuss Danan y hasta hace algunas hora era el Regente de “La Ciudad” ahora solo quedan ruinas de ella, y mucho me temo que tu eres el culpable. -

- ¿Yo?. -

- No lo tomes a mal, pero temo que has logrado crear “El desequilibrio verdadero” y finalmente ha llegado la hora apocalíptica. -

- No entiendo. ¿Cómo pude haber desequilibrado una ciudad?. Eso no es posible. -

- Lo es. Al menos aquí. Creo que te has dado cuenta de que este lugar no es al que perteneces. Esto es una especie de realidad alterna. Sin embargo, tiene reglas de las cuales no es posible romperlas, entre ellas y la más importante, querer escapar y tener miedo del refugio en el que te encuentras. Esa, jovencito, es una de las causas del desequilibrio.

- Pero... si usted sabia que nadie pertenece aquí, porque siempre permanecí en total ignorancia, todo parecía irreal, y sin embargo hubo gente muerta, hubo heridos, esto no puede ser tan falso como dice. -

- Lo es. Todo lo que has visto son solo robots, que yo mismo me he encargado de diseñar, todo fueron solo representaciones especialmente hechas para ti. Eras el único humano despierto que habitaba en la ciudad a excepción de mí. Los demás se encontraban en estado comatoso en el hospital. -

- ¿Robots? ¿En estado de coma? No entiendo. -

- Seré breve, yo llegue hace cincuenta años, cuando tenia 24 años, desperté en un pueblo fantasma, había mas gente que también deambulaba, esto era una especie de limbo, pero aun así sentía hambre y frío, pero de un modo u otro aparecían ahí alimento y un lugar en el cual dormir. Conforme pasaban los días con solo desear algo, esto se creaba, les dije a quienes caminaban sin rumbo, pero ya habían perdido la razón. Con los meses fui diseñando y construyendo “La Ciudad” así también fui entendiendo que aparecemos aquí de la nada y de la misma forma desaparecemos. Con el tiempo, cuando la gente aparecían me encargaba de recibirlos, les contaba del lugar en el que estábamos, muchos de ellos creyeron e hicimos juntos lo que viste. Pero la incertidumbre de que podíamos desaparecer en cualquier momento, solo hacia de nuestro vida aquí una especie de sueño, el cual todos los que me acompañaron lo disfrutaron muchísimo, sin embargo el tiempo pasa, y la gente nueva que despertaba ya no pensaban igual, por lo que decidí en hacerles creer que una guerra y un virus habían hecho de la ciudad lo que era. -

- Pero. ¿Cómo es que llegamos aquí? ¿Por qué? Todo esto suena tan absurdo. -

- También yo pensé lo mismo Iñaki, pero comprendí que no podía luchar con cosas que no comprendo y decidí utilizar lo que tengo para hacer de este un sitio habitable para todos los que despertaban, aquellos que no lo hacían, los llevábamos al hospital, muchos permanecían ahí hasta desaparecer, otros como tu despertaban y se integraban a la ciudad, pero desde hace mucho tiempo que todo el mundo permanece en coma, tu fuiste el único que en varios meses despertó. Sin embargo descubrí que no estarías a gusto con nosotros, pero nunca imagine que tu presencia sería el final, que debo admitirlo, desee muchas veces desde que la única compañía que tenía eran los robots. -

- Entonces... ahora ¿qué va a pasar?. -

- No lo sé. En realidad no lo sé. Solo nos queda esperar. Espero que tu estancia aquí sea de lo mas placentera. Y me disculpo por no haberte dicho la verdad antes, pero supongo que por algo pasan las cosas. Gracias por cuidar de Kai, ese gato puede ser un dolor de cabeza a veces, no me preguntes sobre el, porque al igual que tu, no se como llegó aquí. -

El otro dirigible se encontraba frente a nosotros, avanzábamos rápidamente en medio de esta llanura desértica. Entonces aparecieron al fondo unos puntos negros que se acercaban hacia nosotros. El Dr. Danan enfoco el lente lo mas que pudo y pudimos constatar que se trataban de dirigibles igual en el que nos encontrábamos. Nos acercamos un poco mas, solo para darnos cuenta de que esos dirigibles eran solo un reflejo.

Alcanzamos el limite de ese enorme espejo, descendimos en la canasta, caminamos hasta estar frente a frente con nuestros reflejos. Parecía como un velo, tenia como vida propia, incluso emitía un breve murmullo.

- Parece que este es el limite del mundo. -

- ¿Y después que?. -

- Después la nada supongo. -

- Bueno creo que tendremos que cruzar al otro lado ¿no crees?. -

- Pero... -

Entonces Kai bajo de mis brazos y camino hacia el velo hasta desaparecer en el. Justo cuando su cola desapareció, un temblor de tierra apareció, la tierra comenzó a moverse hacia el velo que lo devoraba y lo desaparecía en sus fauces misteriosas.

Corrimos hacia la canasta y subimos a toda prisa, solo para darnos cuenta de que el aire también era absorbido por se velo así mismo también los dirigibles se acercaban a el. Uno de los dirigibles permaneció quieto en el aire por lo que desapareció, el nuestro comenzó a ser devorado pero como pudo el Dr. Danan logro sacarlo de ahí y volar en sentido contrario.

Un ruido gigantesco se acercaba a nosotros, logramos observar que a lo lejos y a toda velocidad la ciudad ahora en ruinas también era arrastrada hacia este final inevitable. De la misma forma la tormenta se acercaba a nosotros.

En menos de lo que esperábamos la tormenta estaba sobre nosotros, pero así mismo también desapareció en ese velo que parecía que nos alcanzaría de un modo u otro, la ciudad tardo un poco mas en llegar, pasó sobre nuestros pies, en ruinas, destruida, el Dr. Danan no pudo contener el llanto al ver semejante espectáculo.

- Dr. Danan ¿Qué fue de los humanos que estaban en el hospital? -

- No lo sé, confío en que hallan desapareció antes de que la ciudad se redujera a escombros. -

- ¿Y que será de los rebeldes? -

- Los rebeldes no existen. Yo invente toda esa historia. -

Entonces nos dimos cuenta de que estábamos rodeados por ese velo, ahora el paso era lento, no había modo de escapar. El Dr. Decidió que lo mejor seria descender y afrontar en el suelo el final. Dejo el dirigible en piloto automático y rápidamente desapareció ene el velo reflejante.


Finalmente no quedaba nada mas que un par de metros de radio alrededor de nosotros. El Dr. Danan con su vejez encima corrió hacia el extremo del velo más cercano y antes de entrar se despidió con un gesto en la mano.

Me quede solo rodeado de mi reflejo. No podía hacer nada, no tenia el valor para atravesar esa pared reflejante.

Decidí esperar, me senté en el suelo y cerré mis ojos.




¡Despierta Iñaki!

¡Despierta carajos!

!Que alguien llame a emergencias!

¡Se esta muriendo!

¡Iñaki se esta muriendo!

21 de julio de 2009

Ahora

Finalmente estoy fuera de la ciudad.Justificar a ambos lados

Si no fuera por ese gato que aparece de la nada ahora me encontraría detenido. No se como puedo caer encima del soldado y arañarle la cara, termine por seguirlo a través de callejones hasta finalmente entrar en el mundo subterráneo que parecía mas vacío aun que el exterior.

Una tormenta se ha posado sobre la ciudad, como una especie de presagio, ahora no se que voy hacer, no puedo regresar a la ciudad, pero creía que afuera de ella habría algo mejor y no un desierto.

Ahora solo tengo que cuidarme de los rebeldes. Solo espero esto no sea una copia chafa de Mad Max. Hace calor espero llueva aquí también, lo único malo que el refugio que tengo es el desagüe y lloviendo en la ciudad me imagino que esto se convertiría en un río.

Es tan extraño este paisaje, no hay arboles, no hay arbustos, no hay caminos ni carreteras, no hay nada, es como si la ciudad la hubieran arrancado y plantado ahí, desde aquí tiene un aire artificial y falso.

Si esto es un sueño, seguro debí de haberme fumado la mota ya pasada. Todo esto es tan extraño, no es como la Matrix, simplemente... todo esto es absurdo.

No sé que voy a comer, tengo sed, solo espero no tarde en llegar la lluvia para refrescarme.

No sé que sería lo mejor, estar en un lugar cerrado protegido de este clima extremo o estar aquí al aire libre viendo como una tormenta cae sobre la ciudad.

Pero... ¿Qué es eso que vuela sobre la ciudad? No hay aves tan grandes.

Espero que no sean avionetas.

¡No mames!

Creo que vienen hacia aquí.

¿Y ahora qué hago?

¿Qué carajos voy a hacer?


18 de julio de 2009

Sobre

Tengo nauseas.

Aun siento los disparos, aun veo correr la sangre.

No pude hacer nada. Aparecieron de la nada e hicieron fuego contra todos.

Todo fue tan rápido, que no alcance a entender que estaba pasando, pero debía suponerlo, los rebeldes de algún modo debieron ingresar a la ciudad y estaban atacando la ciudad.

Simplemente me quede congelado. Entonces una bala paso sobre mi hombro y reaccione. Corrí con todas mis fuerzas.

Soy un cobarde lo sé. Y no quiero salir de aquí, no puedo, tengo miedo de morir. Hoy tengo mucho miedo de morir.

No puedo creer que haya muerto tanta gente, pude haber sido yo, si tan solo llego cinco minutos antes, ¿cómo entraron a la ciudad?, ahora no se si ellos puedan ayudarme a entender que carajos pasa aquí.

Hongos.

No recuerdo haber visto hongos desde que estoy aquí, se ven tan extraños, como ojos que me miran, como ojos que dan vueltas sobre mi...

Me siento mareado, quiero vomitar... no, no quiero vomitar, no me gusta.

Estúpidos hongos.

Pero... se sienten como... ¿¡plástico!?...

Cables, hay cables debajo del pasto... son falsos, estos hongos son falsos.

Pero... ¿por qué?

¿Un micrófono? Esto parece ser un micrófono. ¡No mames!. ¿Qué es esto? Parece... el lente de una cámara... es... es... una cámara.

¡No mames! ¡No mames!

Pero... ¿para qué?

Esto no puede estar sucediendo... como puede haber cámaras y micrófonos ocultos en el pasto.

Esto me esta poniendo paranoico.




- Levante las manos. -

- ¿Ehhh?.

- Esta usted detenido. -

- ¿De que habla? ¿Por qué? -

- ¡Callese! O le disparo. -




¿Qué carajos esta pasando aquí? ¿Por qué un soldado me quiere detener? Esto no puede estar pasando, esto debe ser un sueño, si, debe de ser un sueño...

14 de julio de 2009

Con

Comienzo a sospechar que todo esto es una farsa. Tengo esa impresión claramente definida.

Es absurdo que en esta ciudad, la única gente que parece cuerda están obsesionados con tener algo que hacer y únicamente hay de dos: militar o medico. Ninguna de las dos me parece razonable para mi, cuando paseo por las calles, los pocos sitios que se encuentran abiertos sus dueños no pueden hablar de otra cosa que no sea sobre su negocio.

Nadie parece ver que toda esta situación es artificial. A todos les han hecho un "cocowash" para omitir ese pequeño detalle. ¿Por qué la gente se empeña en hundirse en absurdos detalles cotidianos? ¿Por qué la vida de las personas aquí gira en torno a su profesión? ¿Por qué nadie quiere ver mas allá de todo esto? ¿Por qué nadie reflexiona sobre lo extraordinario que sucede en esta ciudad?

Y sin embargo, a pesar de haber recorrido toda la ciudad, no he encontrado a alguien que tenga la misma impresión que yo. Esta extraña versión de "Pleasantville" me esta comenzando a desesperar.

Hasta el día de hoy nunca he encontrado indicios de que la ciudad se este defendiendo de los ataques de los rebeldes, pero eso si, todos los militares siempre están ocupados en un algún ataque, desde mi habitación únicamente se ve un fuego a lo lejos, pero eso es todo. ¿Dónde están los rebeldes? ¿Dónde los sonidos de una guerra?

Tal vez los rebeldes entiendan todo esto que estoy pensando..

Ahí esta de nuevo ese pinche gato latoso. No ha dejado de perseguirme últimamente, pero tengo que admitir que es de los pocos animales domésticos que he visto que se mueven a su antojo, todos los demás siempre están cerca de su dueño, y siempre tienen un aire aletargado, al igual que casi todos los habitantes de esta ciudad.

¡Es definitivo! Me temo que todo esto es una farsa. Pero... ¿por qué? ¿para qué? ¿quiénes lo hacen? No tengo la mas puta idea, pero a partir de ahora, tendré que encontrar el modo de salir de la ciudad, debo de reunirme con los rebeldes.

¿Qué habrá mas allá de ese fuego que se enciende todas las noches?

26 de junio de 2009

Mientras

Parece que han pasado años, pero no, en realidad solo unas semanas, con lo cual me ha bastado para entender un par de cosas:

1. Esta ciudad se parece mucho a donde vivía, pero no es la misma. Cada recorrido que hago me demuestra que por mas vacía que pueda parecer, no es la ciudad que recuerdo.

2. Todo el mundo en esta ciudad vive en su propio mundo. A nadie le interesa saber porque no hay un solo insecto en toda la ciudad, a nadie le interesa saber nada más excepto a la actividad a la que se están dedicando.

Es decir o me estoy volviendo loco o hay algo detrás de todo esto. Lo malo es que soy el único en toda la ciudad que piensa tal cosa.

Llegar a esta conclusión me ha tomado un par de semanas. Cuando cayó la noche mientras buscaba el camino a casa, una brigada de soldados me detuvo, revisaron mi maletín, no me dirigieron la palabra, únicamente me trasladaron a una especie de cuartel.

Ahí uno de ellos me asigno una habitación en el ultimo piso de lo que pienso alguna vez fue un motel, me entrego además una maleta con ropa de civil, me indico el camino a la habitación, mientras me informaba donde estaba el comedor, la lavandería, la biblioteca, la sala de juegos y el gimnasio. Al llegar a la habitación me dijo que debería de cortarme el cabello porque solo los "Anarquistas" lo llevaban largo, pero me dijo que no me lo rapara a menos de que decidiera unirme a las fuerzas militares de la ciudad, supongo que el gesto que hice no le pareció por lo que se despidió de prisa.

En la habitación, justo en la entrada había una pequeña estancia, hacia el fondo esta la recámara con una televisión sobre un mueble y a la derecha un baño. La habitación después de todo era bastante confortable, tenia una amplia ventana hacia un parque que había detrás del edificio. En el baño había todo lo necesario para el aseo personal, incluyendo una maquina de afeitar y tijeras, por lo que extrañamente seguí su recomendación y me corte el cabello sin dejarlo muy corto, solo por si acaso, eso de ser soldado no es algo que me pareciera agradable y si por acaso hubiera confusión me deje un poco de barba.

A la mañana siguiente en el comedo me di cuenta de que todo el mundo tenia un pequeño aparato muy parecido a un teléfono celular, pero este era únicamente una pantalla de 8 centímetros con la cual recibían noticias sobre los ataques de los "Anarquistas" y mas tarde descubriría que es como se les indican sus obligaciones.

La verdad es que al inicio deseaba tener uno de esos "Comunicadores personales" o como ellos los llamaban "CoP" pensaba que de algún modo podía comunicarme con alguien que conociera, pero no, a los tres días de estar ahí, apareció en mi puerta mi "CoP" que no es nada mas que una especie de mensajes absurdos sobre noticias que no repercuten en la ciudad, eso si no era texto nada mas, incluían animaciones, vídeos, cartoons, pero no había modo de intentar hacer contacto con nadie. Además cuando lo tuve en mis manos me di cuenta de que no era nada mas que una especie de jefe de bolsillo que te dice lo que debes hacer.

Así que en vista de que el asunto de la milicia no me llamaba la atención, decidí regresar al hospital de donde salí, al llegar había tantos enfermos y tanto trabajo por hacer que termine ayudandoles en todo lo que podía, así pase casi 36 horas, hasta que hablando con una de las enfermeras me di cuenta de que al igual que los soldados, no tienen otra ocupación que el hospital y reciben instrucciones de su "CoP" mas allá de eso el mundo no existe. Entonces me di cuenta de que la gente en verdad actuaba extraña.

Regrese al edificio del cuartel, abrí el portafolios que me entregaron al darme de alta, estaba mi historial medico, mis datos personales, una identificación que me declaraba en estado de coma indefinido y también estaba un libro que narraba la historia de como la ciudad se convirtió en el cerco que es actualmente. Pero todo parecía tan extraño, tan planificado que solo me causo mas sospechas sobre lo que pasaba en la ciudad.

Recorrí la ciudad y cuando me encontraba con alguien le preguntaba sobre ellos, sobre su vida, sobre la ciudad, todos tendían a responder lo mismo, o en todo casi recitaban de memoria lo que había en el libro, cuando intentaba explicarles que si eso no les parecía extraño me decían que así ha sido siempre, no hay nada de extraordinario.

Esta noche el insomnio no me deja dormir, he encendido la televisión para ver si la estática me arrulla, pero nada me ayuda a conciliar el sueño, mientras a lo lejos parece que los "Anarquistas" han roto el cerco de la ciudad, mientras yo siento que cada día aquí es como ir muriendo despacio sin saber a ciencia cierta si esto es un sueño o bueno mejor dicho una pesadilla, o si de verdad esto es el mundo real, siento pesados mis ojos, me recostare un momento, solo un...


12 de junio de 2009

Despues

He pasado de largo tal vez. En este sueño lejano, he conseguido únicamente dormir por un periodo extrañamente para mi breve pero para el resto del mundo ha sido increíblemente largo, despierto, miro alrededor, el tiempo parece ser cosa sutil pero sobre todo voluble, cambiante, inestable, aunque más que eso ha adquirido al parecer la facilidad de olvidarse... todo el tiempo eventualmente parece tener ese don de olvidarse.

Mi cerebro poco a poco comienza a despertar, a comprender todo lo que los médicos me indican, parece que tienen prisa por dejarme salir. Camino despacio tratando de encontrar en las calles un rostro conocido. Mis piernas se tambalean un poco. Todo parece desierto. Lentamente comienzo a entender lo que ha sucedido en la ciudad.

La avenida principal se encuentra vacía, los grandes almacenes están cubiertos de polvo, hay letreros de cerrado por todos lados, nada parece sobrevivir al inevitable poder de la historia.

Cierro los ojos, trato de recordar como lucia esta calle cuando todo era luz de neón, bytes, poesía, borracheras, cielos de luna llena... ahora es un páramo inhóspito, cubierto de carteles descoloridos por el sol, las esquinas se encuentra llenas de papeles arrugados, mojados y vueltos a secar por tantos días de abandono a la intemperie.

Nada es como antes.

Llego finalmente a sitios conocidos, han sobrevivido al tiempo, mantienen intacto su brillo, se han resistido al sepia profundo que embarga la ciudad. Entro como siempre a ver, a mirar, a observar, tantas cosas nuevas, tanta luz, tantas cosas que fluyen en el multiverso dimensional que se crea cuando se imaginan mundos paralelos producto de una serie interminables lineas hechas por símbolos pequeños que hilvanan palabras y que reunidos conforman una serie de viajes emocionales indescriptibles.

La tarde comienza a desfallecer, a lo lejos las alarmas anuncia el toque de queda. No tengo a donde ir, el hospital me da dado de alta, además mi espacio ahí de seguro ya ha sido ocupado.

Me paseo ligero por las calles que lograron sobrevivir a mi sueño comatoso, mientras tanto, intento recordar cual es el camino mas seguro para llegar a casa, espero que aun exista.

Un viento frío comienza a golpearme el rostro, entonces el pasado comienza a pesarme en los ojos.

Maldito virus, maldita guerra.


28 de abril de 2009

Actuar

De nada sirve el pensamiento, cuando la unica opción es actuar.

Tautología

Loop preestablecido
vórtice en los ojos
silencio petrificado
tautología.

Cuando se estaciona

En medio del silencio
todo parece tan grande
el mundo se hace nada
todo se reduce al eco del olvido
palabras simples
noches sin tiempo
incertidumbre sobre el cielo
recuerdo vacío.
En medio del silencio
todo parece tan grande
el mundo se hace nada...
cuando se estaciona el miedo.

Reflejo estelar

Reflejo de aire
eco futuro
luz polar
amalgama de sueños perdidos
retazos de besos rotos
acuarela sobre el mar
lluvia pixelada
silencio olvidado
recuerdos de nadie
suspiro de humo
instinto estelar.

Flash

La vida es como un flash.


¡Click!


Y ya pasó.

21 de abril de 2009

Puente al infinito

İskele.. Fotografia Original de Eda Apaydın

Finalmente el mar se había recogido, los restos de un naufragio miles de veces repetido, por fin se extendían sobre la arena. Miles de letras llenas de luz.

Sabía que todo era un sueño compuesto de bytes, mezclados con un sin numero de sensaciones y emociones, todo era tan simple, tan plano no se necesitaba mas para ser feliz.

Tantos años habían pasado, tantas veces el agua hizo tambalear la nave, tantas veces navego a la deriva, tantas veces la esperanza era la única tabla firme en ese océano virtual... tantas, tantas cosas, nunca paso por su mente alguna vez estar en tierra firme, ni tampoco se imagino poder bogar en otras naves, mucho menos volar libre por el cielo y sobre las nubes.

Cuando su barco quedo a la deriva, cuando las hadas abandonaron la cubierta y cuando el fin parecía solo cuestión de tiempo, se mantuvo en pie, en firme; continuo cada noche escribiendo a las estrellas, durante esos días las gaviotas eran su única compañía. Todos sucedió una mañana de pronto, se comenzó a desvanecer ante sus ojos aquello que fue su hogar, su planeta, su lugar de origen. Sabía que era tiempo de volver a empezar.

Después el mundo le pareció pequeño, descubrió que había tantas cosas nuevas por conocer, se dio cuenta que perder la estabilidad de su barco le había regalado un camino hacia cosas mucho mas grandes e importantes, reconoció que a veces es necesario perderse para reencontrarse, dejar de lado lo fácil para así descubrir en las pequeñas cosas la sonrisa que nos guarda el universo.

No hay tiempo, eso es solo una idea que limita. Ahora todo el mundo le pertenecía, por el simple hecho de vivir sobre el.

Esta mañana recordó el barco del cual naufragio al saber que el mar se había recogido y fue a la bahía.

Miles de letras llenas de luz cubiertas de magia, de arena.

Sabía que todo eso ahora era un recuerdo compuesto de bytes, mezclados con un sin numero de sensaciones y emociones, todo era tan simple, tan plano... cuando vivía en ese barco no se necesitaba mas para ser feliz.

Tanto tiempo ya ha pasado... tantas cosas han cambiado desde entonces.

Imaginar que naufragar y quedar en medio de la nada, fue el comienzo de aventuras más grandes. Tanto miedo al vacío, a perderse, a lo nuevo que la vida siempre ofrece... ahora todo es un recuerdo, hoy sus sueños construyen el punte donde sus pasos se encaminan hacia el infinito.

16 de abril de 2009

Se pierden, se extravían

Como ojos que no miran
el papel en blanco en el aire no palpita
no hay razón en la tinta que enciende tu pupila
ni tampoco hay una voz que cante esta melodía
como ojos que no miran
se pierden los caminos
se extravían las salidas.

15 de abril de 2009

Demasiado tarde a mi amanecer

¿Recuerdas cuando nos conocimos? Tu celular se deslizo de tu mano y llego a mis pies. Ambos esperábamos el tren, yo recargado en la columna de anuncios que nadie lee, tu entretenida enviando mensajes de texto. Ese fue el cuando.

¿Recuerdas como nos conocimos? El grito que salió de tu delgado cuerpo me hizo volver de mis elucubraciones, en el suelo vi tu teléfono sonando, mi mano se acerco a el entonces la tuya se poso sobre la mía, nos miramos a los ojos, es de esas ocasiones en que un segundo parece tardar una eternidad.

Entonces me sonreíste, tomaste el teléfono y contestaste.

Finalmente llegó el tren que esperaba, sin dejar de observarte camine hacia el vagón, las puertas corredizas se cerraron y en ese justo segundo en el que el tren comienza a avanzar nuestros ojos se cruzaron de nuevo. Te quedaste en la estación.

Pensé que nunca volvería a verte.

El tiempo paso y nunca volví a encontrarte en la estación.

A veces me pregunto que hubiera pasado si no hubiera tomado ese tren... a veces me pregunto porque subí mecánicamente sin siquiera intentar saludarte... miedo tal vez.

Después de tantos años no esperaba encontrarte de nuevo.

No en este preciso momento.

Cuando tu sonrisa llega demasiado tarde a mi amanecer.


"Japan Fragments (DSC7294)" Fotografía de fabuchan

12 de abril de 2009

My beautiful disaster

"wrapped up in you" Fotografía de rosiehardy


Tantas cosas en el aire, tantos cabos sueltos, tantos días por venir... todo es un desmadre.

Pero me vale.

Hoy el futuro me vale madre.

Todo lo que quiero hacer hoy es estar así, quieto, solo ver al cielo que se enciende con las horas, despertar después de soñar tanto y no sentir la humedad en el aire, haré caso omiso al sudor que impregna mi cuerpo... hoy solo quiero sentirme bien.

Me he reído tantas veces en las últimas horas, que me parece imposible creer que la luna brille tanto ahora mismo. ¿Que rápido se va el tiempo cuando ríes por nada? Simplemente la vida se puede ir en pasártelo bien... ¿Para que tanta melancolía, tanto vacío de nada, tanto recuerdo, tantas preocupaciones... para que carajos... para que llenarnos los días de tanta mierda?

No estoy pacheco, que quede claro.

Ya, ya lo sé, así es, tienes razón, pero hoy estoy en mis cinco sentidos, viviendo lo chido de este desmadre que es mi vida.

Deberías de aprender español porque mi francés es muy malo... mira, te lo digo en ingles: I love my beautiful disaster.

Welcome to my world. Ya, ya, ya... cállate, no tengo ganas de estar traduciendo, ven, acuéstate a mi lado y olvídate de todo... disfruta el hecho de estar aquí, conmigo... o si lo prefieres... podemos darle... So? You know what I mean... solo hay que pasárnosla chingon en este chido desmadre.

¡Que no carajos!

No estoy pacheco.

10 de abril de 2009

Vértigo de excesos

Llueven palabras
se desliza el beat box del universo
auroras boreales indivisibles
pensamiento workoholic
aliento moka chocolate
se revientan las miradas
palpitan las hojas del cuaderno
el sol se torna invisible
sobre un valle gin tonic
vértigo de excesos donde la imaginación es la válvula de escape.

9 de abril de 2009

Martes de cine porno y algodones de azúcar

Fumo lentamente la hierba multicolor, ahora,
todo en esencia es una irreverente ironía
he creído mas en Dios que en mi instinto
pintado mas árboles azules
que poemas sobre el cielo

El gemido de la chica tetona me recuerda donde estoy
mis lentes se empañan de la excitación ajena
del fake sex, la mota y los algodones de azúcar.

El jet lag del horario de verano me jode
el porro ya se ha terminado
mientras la rubia de la escena enciende fuego entre sus piernas
nada mas absurdo, en teoría,
¿dónde carajos estas Rebeca?
tengo que encontrar la salida
volver al aire
pero el pinche sol engaña a mis pupilas.
La calle me regala su versión Disney
mientras mis pies se elevan un poco;
en el cielo vuelan perros azules
mientras yo únicamente tengo antojo de beber algodones de azúcar en tu cuerpo.

8 de abril de 2009

Los brazos abiertos al sol

"Mexican SKY" Fotografía de Luis Montemayor


Desde aquí la torre Latino parece ser absolutamente nada. Tan pequeña... tan simple.

Amanece de nuevo en la primavera de esta Ciudad de México que parece aletargada y penosamente lenta, tal vez solo sea impresión mía pero hoy todo parece tan lleno de luz mientras que el tiempo es simplemente un concepto que no tiene función.

El gato de ojos azules se encuentra en la azotea del edificio de enfrente, al igual que yo se baña de sol en este amanecer que parece ser eterno. Mis pies descalzos sienten el frió del piso mis manos tocan el oxido del balcón sobre el cual me recargo, el olor de plantas húmedas de la vecina de a lado me hace recordar los bosques de altos pinos donde solía correr cada mañana antes de vivir aquí.

Suena la tetera, inhalo de forma ligera hasta llenar mis pulmones y me dirijo a la pequeña estufa, me sirvo el agua caliente en la taza mas grande que encuentro, coloco un par de bolsitas de té, veo como poco a poco el agua toma color y un olor particular llena mi cara, sorbo despacito el liquido caliente, siento como me quema la lengua, detengo el sorbo, alejo la taza de mi boca y sonrió por mi ingenuidad.

Mientras me viene de la nada ese día en Zihuatanejo cuando aprendí a nadar, recuerdo sentir el agua rodeándome, abrazándome, haciéndome sentir pequeñito ante tanta cantidad de agua que sin embargo me enseño que la vida es un ir y venir continuo, que la fuerza de lo inevitable sucede si lo crees en firme pero sobre todo aprendí que se puede ser feliz con absolutamente nada, pero esa si que es una larga historia.

La luz del sol inunda el balcón haciendo más luminosa la habitación. Bebo el té lentamente sintiendo como su calor me llena el cuerpo, como poco a poco mi cuerpo se va llenando de una energía peculiar. Tomo la guitarra y comienzo una melodía simple, mi voz se despierta, comienzo a tararear, no necesito una letra, solo ocupo dejarme llevar por todas las pequeñas cosas que me hacen el día, por todo aquello que no me pueda dar el dinero.

El eco de la ultima cuerda resuena en la habitación, voy hacia el balcón, el gato ya se ha ido, abro los brazos al sol, sonrió al infinito y agradezco al universo tener el poder de sentir, de disfrutar, de vivir todo cuanto sucede en mi vida.

El día comienza hoy, la vida comienza hoy y solo esta en mi pasármela chingón.

Voy a dejar de lado el smog, los manifestantes, el trafico... mientras camino a la estación del metro en Bellas Artes.

El día de hoy no puedo evitar sentirme el hombre mas afortunado del planeta mientras extiendo los brazos al sol y me río a carcajadas en medio de todo simplemente porque estoy aquí.

7 de abril de 2009

Siempre


Sé que me tarde un poco, pero mi madre me ha puesto a limpiar la habitación.

Mira que ya el sol comienza a irse, tenemos que subir a la cima aprisa, pero seguro que pronto llegan todos para acompañarte en tu viaje y si no han llegado debes encontrarlos, seguro que están escondidos en las nubes.

Después de tanto tiempo, creía que para siempre era una palabra muy fea, no volar para siempre es la cosa mas fea del mundo, pero hoy ya veras como todo vuelve a empezar y para siempre sentirás el viento en tu alas.

Recuerdas las noches de invierno con el viento frío de la montaña, ya sé que extrañabas no estar con los tuyos, pero no podías aun regresar a casa. Pero ya pronto volverás al aire, al viento, a todo eso que habías perdido por estrellarte en el suelo.

Ya hemos llegado... mira como el cielo ilumina todo de rojo.

¿Estas listo?

¿Ahora?

Vuela... vuela...

Anda, si, así... sigue... si, eso... mas arriba... lejos... mas lejos... hasta siempre... hasta siempre.


5 de abril de 2009

Mira... el mar

- Tengo miedo.
- ¿De qué? Si aquí no hay nada.
- No sé.
- Entonces para que pierdes el tiempo en un miedo sin fundamento.
- Ya me conoces.
- Empiezo a creer que no.
- Ayer soñé que podía volar.
- A veces también sueño eso.
- Recuerdo haberte visto en algún sitio desde las alturas.
- Pero no recuerdo mucho de mi sueños, así que no puedo asegurarlo, los sueños son tan...
- Dificiles de creer.
- No, muchas veces un sueño es solo la reproducción de la realidad.
- ¿Entonces?
- No lo sé.
- ¿Cómo es que llegamos aquí?
- Tu me llamaste.
- No recuerdo haberlo hecho.
- Eso es normal, si logras darte cuenta de donde estamos.
- Tengo miedo.
- ¿Sabes?
- ¿Qué?
- Nada, olvidalo... no vale la pena... a veces pienso que puedo extrañarte.
- ¿Si? Pues... gracias supongo.
- ¿Crees que podamos algún día escapar de todo esto?
- ¿De qué?
- De esto...
- Es inútil preguntarnos eso.
- No es justo.
- A mi también me parece injusto que uno de los dos no recuerde lo que aquí vivimos.
- ¿Crees que algún día nos podamos reconocernos a la luz del día?
- Quiero pensar que así será.
- Ya es hora de partir.
- Mira... puedes verlo.
- ¿Qué?
- Allá por sonde sale el sol, mira bien
- ¿Dónde?
- Hacia el sur... el mar. Mira... es el mar.
- El mar.

(Entonces la luz llena el escenario y los personajes desaparecen)

- (Despertando de muy mal humor) Otro día mas. No quiero ir a trabajar hoy. Nunca puedo descansar bien, estúpidos sueños... tener tanta estupidez en la cabeza no es sano. Me parece que siempre sueño lo mismo, todo me resulta familiar pero no puedo identificar nada. ¡Malditos sueños... no me dejan descansar!

(Mientras tanto en el edificio de enfrente)

- (Entre sueños) Mira... el mar. (Un largo suspiro surge del personaje que termina por sonreír) Nunca puedo recordar mis sueños, otra vez el mismo lugar... y el mar que nunca podre conocer.

"Golden Blue" Fotografía de -Wink-

4 de abril de 2009

No sé que pasará mañana

La efervescencia del estúpido sensor quiebra los pensamientos.

Ya no soy quien para decir que la noche estaba quieta cuando tus ojos ensordecieron el mundo.

Es que, ¿sabes? en el fondo hay muchas cosas que no han podido rescatarse, tantos naufragios, tantas bombas nucleares.

Quiero besarte, morderte, saberme adentro de ti, mas adentro aun si cabe, llegando a ser parte de la sinapsis de tus neuronas, ser ese torrente sanguíneo único que se sabe inocuo e imperecedero.

Todo en esta noche son solo deseos, imaginación, diversas poluciones, sensaciones en HD, un azaroso mar cubierto de incontables situaciones, viajes en teleféricos espaciales con estaciones lunares incluidas en el brochure de inauguración... todo es en esta noche. TODO.

Por eso quiero creer que todo aquello que no termino por comprender tenga un razón aun mas importante, porque podría ser que la paciencia en medio de este sol de medianoche termine por desdoblarse en un suspiro que se hunde en la vorágine del olvido... por eso creo en que todo es posible aunque el futuro sea una cuestione inherente a la suma de todo quello que pueda pasar después de nosotros.

No sé que pasará mañana. Solo se que quiero estar contigo. ¿Para que? No lo sé, si hay tiempo ya lo descubriremos. Mientras todo lo que quiero es poder hacerte sonreír. Y después ¿qué pasará?... tampoco lo sé... todo lo que tenemos es el hoy, el ahora... y eso es lo único que me basta.

Aun recuerdo cuanto tus ojos llenaron de ruido el mundo. Desde entonces siempre ha sido la banda sonora perfecta.

Es que, ¿sabes? en el fondo hay muchas cosas que no han podido rescatarse, tantos naufragios, tantas bombas nucleares.

Maldito sensor... solo quiebra mis pensamientos.






Puedo percibir la penumbra, sin abrir los ojos extiendo mi mano y apago de una vez por todas la alarma del celular.